David Lozano, entrenador de pádel en Finlandia: “En todas partes están saliendo pistas de pádel como setas”

David Lozano llegó a Finlandia para trabajar de cocinero y acabó encontrando su profesión en el pádel. (Foto de @finpadel).

De España a Finlandia, de cocinero a entrenador de pádel. Estar en el lugar perfecto en el momento ideal no ocurre únicamente en las películas. David llegó a Finlandia con sus estudios de finés y de cocina, pero lo que a él le esperaba en el norte era un boom de pádel. Este campeón juvenil de Cataluña no se lo pensó dos veces y se subió a la ola del nuevo deporte de moda en Finlandia.  

Por Hannu Arvio

Cuenta un poco cómo te ha surgido esto de ser entrenador de pádel en Finlandia.

Bueno, es curioso porque yo jugué a pádel desde los 10-11 años, más o menos, hasta los 20. Entrenamientos, partidos… no mucha competición pero bueno, hice algún campeonato y gané el de infantil y con 14 años gané el campeonato de Cataluña. Y a los 20 años dejé de jugar porque no me dedicaba a competir. Pasaron diez años, yo seguí con mi vida y, bueno, al final acabé aquí en Turku, en Finlandia. Tenía estudios de cocina y empecé a trabajar de cocinero y un día, Jenni, mi pareja, me dijo «vamos a ir a probar una pista interior de pádel nueva que han abierto».  Las pistas interiores han creado en Finlandia un ambiente de pádel muy bueno, porque en un interior se puede jugar a un juego divertido, social, con el que se hace deporte. Esto ha sido aquí como un boom.

Entonces, tú llegaste aquí con tu conocimiento de pádel en un momento y a un lugar perfectos.

Sí, sí, al final resulta que ha sido así porque ha sido justo cuando empezaba todo esto del pádel aquí. El año pasado había una pista de pádel en todo Turku. Y ahora mismo, hay siete en un centro de pádel, cinco en otro centro, más una, que es la primera, la original, son trece. Trece pistas, pero se van a construir más. En un año ha pasado de haber una pista interior a haber trece.

¿Cómo ves tu nivel como jugador en Finlandia? ¿Eres uno de los mejores?

Como tengo un aprendizaje desde pequeño, el aprendizaje que hice se me quedó grabado en el cuerpo, está ahí. Y cuando vine aquí lo empecé a recordar. Empecé a recordar, empecé a interesarme más por el pádel y los buenos jugadores me llamaban para jugar. Cuando jugaba con ellos se quedaban sorprendidos de cómo defendía, porque lo más difícil del pádel es la defensa, que es donde están las paredes y donde la pelota viene con diferentes velocidades, diferentes efectos, rebota de maneras diferentes en la pared… y cuando has aprendido esto bien desde pequeño lo tienes automático, no tienes que pensar. En cambio, cuando la gente empieza de mayor, como muchos finlandeses, resulta algo muy complicado.

Un jugador finlandés generalmente es un jugador de tenis que se pasa a pádel. ¿Puede ser un jugador bueno de tenis pero que tiene que aprender los trucos del pádel?

Lo que está pasando ahora en Finlandia es que hay muchos jugadores muy buenos, muy de ataque. En el pádel está la defensa detrás de la línea del fondo, y el ataque al lado de la red. Cuando los jugadores finlandeses atacan, atacan muy bien. Son muy rápidos, muy físicos, también técnicos, porque cuando vienen del tenis tienen técnica para hacer las voleas bien pero, claro, el tema de las paredes es lo que necesitan aprender. Y ahí es donde pensé «esto puedo enseñarlo yo porque lo tengo aprendido desde pequeño». Lo he mejorado con el paso del tiempo porque he ido a Madrid a hacer varios cursos de pádel. Tanto cursos de jugador de una semana completa como cursos de entrenador de nivel 1. Me he intentado enfocar en esto, en enseñar bien la técnica y las bases del pádel.

¿Tienes pensado ahora montar tu propio negocio alrededor del pádel en Finlandia?

Sí, justo ahora he hecho el toiminimi que es como el autónomo de aquí para el tema de la contabilidad y todo esto. Es lo que ahora tengo en proceso, terminándolo ya, para poder hacerlo todo por la empresa.

A David no le ha costado acostumbrarse a la vida en Finlandia. (Foto de David Lozano)

A ver si vas a ser el rey del pádel en Finlandia. ¿O igual ya lo eres?

Bueno, ahora mismo como jugador tengo una técnica muy buena, pero mi nivel de competición… yo no he competido mucho, llevo compitiendo desde que vine a Finlandia. Ahora mismo he jugado algunos campeonatos, como seis o siete y estoy el número 22 de Finlandia, jugando en la categoría A que es la más alta.

El pádel es, sin duda, de las cosas novedosas de España que se pueden llevar a Finlandia y de las que se puede aprovechar el conocimiento allí. ¿Has pensado algún otro campo donde un español podría ser bueno o aportar algo más en Finlandia? ¿Cocina podría ser?

Sí, porque la cocina mediterránea es muy buena y aquí hay pocos restaurantes que hagan cocina mediterránea. Algunos que había ya no están, por ejemplo, aquí en Turku había uno pero ya no. Pero sí, el tema de la cocina mediterránea tipo tapas creo que podría funcionar porque aunque hay restaurantes de este tipo están más adaptados a la cocina finlandesa.

Tú entraste a Institut Nòrdic a estudiar finés hace unos 5 años y llegaste a un nivel bastante bueno, ¿cómo ves el finés como idioma? Siempre se dice que es difícil, ¿es difícil para ti?

Bueno, yo no diría que es difícil comunicarme ahora, después de haber hecho unos cursos en Institut Nòrdic, y algún curso en Helsinki. Si quiero mejorarlo necesito ponerle interés y tiempo, para comunicarme de una manera más natural. Pero comunicarme, me comunico bien. En las clases de pádel hablo en finés con los alumnos y con la familia de Jenni hablo en finés y, bueno, con Jenni hablo en español pero cada vez estoy intentando hablar más, a lo mejor un día a la semana, en finés.

¿Y puedes vivir en finés en Finlandia y trabajar en finés?

Sí, y las noticias las entiendo bien en finés. Cuando me hablan lo entiendo perfecto y cuando yo hablo pues a lo mejor alguna cosa podría decirla un poco mejor, pero por comunicarme no hay problema.

¿Qué tal tu adaptación en el país ahora que llevas un par de años en Finlandia?

Bien, me he encontrado bastante natural, no me ha costado el tema de la luz o de que sea más oscuro. Me he acostumbrado porque he organizado mi vida. Cuando estaba trabajando en el restaurante hacía los turnos que me tocaban, de mañana o de tarde, y luego, cuando tenía algo de tiempo libre pues iba a jugar al pádel o a disfrutar de actividades fuera en verano.

«Por todas partes hay naturaleza y a mi eso me encanta. Me gusta la tranquilidad que se respira aquí, y toda la limpieza del ambiente.» (Foto de David Lozano).

Y ¿tienes vida social en Turku?

Sí, en Turku tengo amistades en el pádel, y luego en Tampere tengo también amigos que conocí en el Institut Nòrdic que están viviendo allí, y he ido a verles alguna vez. A ver, amigos finlandeses no tengo, lo que tengo son compañeros del pádel.

Entonces tú tienes tres procesos en marcha. El proceso del trabajo, empresarial, luego estás llevando a cabo otro proceso que es el de adaptación en Finlandia, y en estos dos procesos vas muy bien. Luego un tercero, si se puede preguntar, ¿estás casado o todavía no?

No estamos casados todavía, aunque la idea era casarnos este año, por todo el tema del COVID al final no. Pero sí, me voy a casar el año que viene.

Este tercer proyecto de cambio grande que estás haciendo es un proyecto familiar. ¿Cómo surgió eso?

Estábamos en el Kaffè i Parlå en Institut Nòrdic, conocí a Jenni, a mi pareja y bueno, pues empezamos a salir juntos en Barcelona. Ella me empezó a enseñar Barcelona porque realmente yo había vivido en Esplugues, cerca de Barcelona, pero no había ido a visitar monumentos y sitios bonitos y cosas así. Y empecé a descubrirlo con ella y me gustó, me encontré muy cómodo con ella. Ella luego se fue, se volvió a Turku y me invitó en agosto a venir y yo pensé «ah, pues mira, voy a ir allí». Y bueno, empezamos a salir juntos. Yo estaba empezando entonces un curso de cocina y cuando lo terminé al año siguiente, me vine a Turku. No me lo pensé dos veces, me vine aquí y me gustó mucho, porque la verdad que la ciudad es muy bonita, no es muy grande pero tampoco es pequeña, hay de todo lo que se necesita. Y es muy bonita porque tiene el río en el medio y el archipiélago también es precioso. Y luego tiene bosque, por todas partes naturaleza y a mi eso me encanta. Me gusta la tranquilidad que se respira aquí, y toda la limpieza del ambiente.

¿Se podría decir que en tu camino hacia Finlandia todas las piezas han ido encajando realmente bien?

Sí, se ha desarrollado de una manera muy natural y muy sencilla. Y he encontrado mi camino para estar lo más cómodo posible.

Ha sido muy interesante tu camino, sobre todo el pádel, porque tú fuiste a Finlandia como cocinero.

Sí, yo fui para trabajar en cocina o pastelería, que era el curso que yo había hecho. Y al final encontré que el pádel se me daba bien y en ese momento aquí estaba empezando. Y ahora hay un boom bastante fuerte, se están construyendo pistas de pádel por toda Finlandia: en todas partes están saliendo pistas de pádel como setas, por todos lados.