Támara Aalto, cineasta en Finlandia: «Encontré el objetivo de vivir en Finlandia, formarme en cine y vivir de ello en algún momento»

Támara se fue a Finlandia a recoger fresas y encontrar su lugar en el mundo y acabó siendo Directora Artística en un festival de cine. La trayectoria de esta zaragozana tiene un guion de los buenos.

Por Hannu Arvio

Hannu: ¿Cómo surgió la idea de trasladarte a Finlandia hace 8 años?

Támara: Mi madre es finlandesa y siempre había tenido interés en conocer más la cultura de su país. De pequeña fui de visita tres veces con mi familia, dos en verano y una en invierno. Siempre me sorprendió el contraste entre España y Finlandia. Yo soy de Zaragoza y viví tres años en Barcelona tras estudiar ilustración. Allí vi que las cosas no avanzaban y un verano decidí que era la oportunidad para ir a Finlandia. La forma más económica que encontré fue hacer un voluntariado en una granja de fresas, en Kuopio. La idea era quedarme por dos meses. Entonces durante ese tiempo conocí muchas personas internacionales que estaban de paso, en momentos de crisis existencial y pensando hacia donde orientarse, y yo estaba en la misma situación. Pasado ese tiempo, mi madre habló con una amiga suya que vivía en Kirkkonummi y me ofrecieron alojamiento a cambio de cuidar a sus perros mientras me quedara allí. Al final me quedé tres meses allí, cinco meses en total en Finlandia. En España las cosas no funcionaban para mí así que busqué trabajo y volví a Finlandia con un contrato de Au pair, con una familia mitad española mitad finlandesa.

 

Hannu: Entonces conociste Finlandia desde diferentes puntos de vista. Primero recogiendo fresas, cuidando perros, como Au pair. ¿Cuál fue tu preparación para ir allí? Tu madre es finlandesa y habías ido tres veces allí de pequeña, ¿pero tú sabías el idioma?

Támara: No. (Ríe). Inicié un curso de finés en Institut Nórdic y llevaba dos meses de curso cuando me fui. Nunca planifiqué vivir en Finlandia, solo vine por curiosidad y también porque sentía que me faltaba algo. Al ser mi madre extranjera en España quería conocer sus raíces. No me sentía integrada del todo en España, así que pensé que conociendo ese lado encontraría mi identidad y me podría conocer mejor a mi misma. Mi madre no nos enseñó su idioma y creo que eso hubiera facilitado el camino. De todas formas, ir sin saber el finés me enseñó muchas cosas a nivel personal, cambió mi recorrido el no conocer la lengua.

 

Hannu: ¿Qué te pareció Finlandia durante aquel primer verano recogiendo fresas?

(Ambos ríen)

Támara: En verano me resultó muy idílico. Para mí era una pausa de la vida en general. Venía de tener trabajos precarios en Barcelona y siempre preocupada por el dinero y afrontar ciertos gastos, en cambio allí no había que preocuparse por eso. El intercambio no implicaba salario, era voluntariado a cambio de alojamiento y comida. Eran como unas vacaciones para mí. El trabajo era duro a veces, pero ganaba el estar en medio de la naturaleza, al lado del lago, con sauna, conociendo gente nueva y compartiendo experiencias. No estaba conociendo mucho Finlandia en aquel momento, el lugar estaba un poco apartado, no era exactamente en Kuopio. Era un lugar de paz y relajación para poder tomar decisiones después.

Llueva o haga sol, hay que ir a recoger las fresas

Hannu: Recoger fresas fue un inicio de camino. Ahora estamos haciendo la entrevista en Helsinki, en la capital, donde llevabas 6 años viviendo antes de dirigir un festival de cine latino. ¿Cuál fue el recorrido entre las fresas y terminar dirigiendo un festival de cine en Finlandia?

Támara: Cuando llegué a la capital, mientras estaba también trabajando como Au Pair, vi que había mucha oferta de cursos de cine y era algo que me atraía mucho ya desde Barcelona. En España, dejé de lado el sueño de estudiar cine ya que los cursos son muy costosos, en cambio aquí, en Finlandia, encontré workshops por 20 o 30 euros. Vi que era mi oportunidad para probar mi pasión por el cine. Me formé tanto aquí como en otros países de alrededor más adelante. Encontré el objetivo de vivir en Finlandia, formarme en cine y buscar la salida de vivir de ello en algún momento. Entonces entré en el festival de cine en el que he trabajado como directora artística los últimos tres años. Empecé de voluntaria en el festival en 2015. Vi que la manera de hacer networking o conocer gente nueva es hacer voluntariados en festivales de cine. Allí pude hacer amistades y tras varios años como voluntaria me ofrecieron trabajar como directora artística en el festival, después de formarme todos estos años en cine, haber hecho internships en productoras y haber trabajado en diferentes cortometrajes y películas.

Hannu: Me parece que tienes una trayectoria especial, ¿lo ves tú también?

Támara: Sí, la verdad no tenía planificado ni vivir en Finlandia y meterme en el mundo del cine parecía un sueño inalcanzable. Para mí Finlandia era la tierra de los sueños, en la que todo era posible. Y al ver que aquí sí podía formarme en cine, decidí intentarlo.

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Hannu: Al ser directora artística en un festival de cine latino puedes aprovechar tus conocimientos culturales. Por ejemplo, la lengua española para relacionarte y también tu parte finlandesa, ya que imagino que el público es finlandés ¿no? 

Támara: El público es mixto. La idea es acercar la cultura latinoamericana a los finlandeses, pero también es una forma de agrupar a la comunidad latina en este festival para rendir homenaje a su cultura y poder enseñar otras cosas que no se ven tanto en Finlandia.

 

Hannu: ¿Es un trabajo que te encaja bien?

Támara: Sí, es un trabajo muy apasionante porque he sido responsable del programa, entonces me dediqué a indagar sobre las nuevas películas en Latinoamérica, las voces nuevas dentro del cine e intentar traerlas aquí, para mostrar nuevos directores y directoras que están surgiendo.

 

Hannu: ¿Y cómo haces este seguimiento?

Támara: Al principio hay mucha parte de búsqueda de qué películas han salido en los dos últimos años, por ejemplo, primeras películas de directores nuevos. También ver lo que circula por otros festivales, de lo que se habla desde sus países, lo que se quiere contar. De ahí, hacer una lista de lo que puede resultar más interesante y pedir a las distribuidoras que nos pasen los screeners para poder ver las películas y decidir así, qué es lo más destacable para mostrar en el festival.

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Hannu: Actualmente, ¿cuál es el país de América Latina que está destacando?

Támara: Hay algunos países que tienen más producción de películas porque tienen más recursos y eso hace que destaquen. Aunque actualmente Costa Rica es uno de los países más interesantes, ya que están saliendo nuevas directoras. De hecho, en 2021, inauguramos el festival con una directora de allí, Nathalie Álvarez Mesén y su película debut llamada ‘Clara Sola’. El año pasado, también abrimos el festival con otra directora de Costa Rica, Valentina Maurel y su primera película ‘ Tengo sueños eléctricos’. Al estrenarlas en nuestro festival, aún siendo pequeño, a otros festivales más grandes en Helsinki les llamó la atención y han escogido las mismas películas para proyectar. Así que parece que lo hicimos bien.

 

Hannu: Y al revés, ¿en Finlandia actualmente hay cine que podría triunfar, por ejemplo, en España?

Támara: Bajo mi punto de vista, tanto en España como en Finlandia, los temas que se tratan en el cine suelen ser en la mayoría de los casos específicos de la sociedad de cada país. A mi me resulta más interesante, investigar sobre nuevos directoras y directores que tengan algo diferente para decir, no tan cerrado a la forma o cultura de la sociedad del país en concreto. Hay algunas películas que destacaría como Tytöt, Tytöt, Tytöt, que de hecho la directora Alli Haapasalo fue mi profesora en la academia de cine donde estudié en Helsinki. Aunque la historia que cuenta es sobre la vida de dos niñas que crecen emancipadas sin padres y la situación que se muestra en la película solo podría darse en un país como Finlandia, ya que la forma de vida aquí cuenta con privilegios diferentes en comparación con España. 

Tytöt, tytöt, tytöt fue la propuesta de Finlandia para los Oscar 2023

Hannu: Y después de 8 años, ¿te quedas viviendo aquí?

Támara: Sí. (Ríe). A principios de año, estuve pensando en volver a España. La sociedad finlandesa y española son muy diferentes y hay muchas cosas que echo de menos de España. De hecho, fue una vez que empecé a vivir aquí que me di cuenta de lo bueno de la cultura española. Cuando vivía en España no lo veía. Siempre me surge esa duda, encontrar un hogar es complicado. Las cosas que te gustan de un lugar no están en el otro, y viceversa. Son países muy opuestos y siempre hay algo que va a faltar. Por el momento, tomé la decisión de quedarme hasta finales de año en Finlandia. Ya son 8 años aquí, debería crear nuevos vínculos en España, ya que en cine prácticamente todas mis conexiones están aquí en Finlandia. Lo bueno es que en Finlandia siempre hay la seguridad de poder tomar decisiones que quizá en España no podría tomar.

 

Hannu: ¿Cómo funciona esa seguridad en Finlandia?

Támara: Aquí sabes que no te vas a quedar nunca en la calle. Hay una red de beneficios para cada ciudadano, que sabes que por muy mal que te vayan las cosas no te van a dejar en la calle. Yo creo que eso debería ser un derecho universal, no sólo de ciertos países. Y que por ello se crea una gran diferencia entre países del sur y del norte. Los países del sur tienen una sociedad más comunitaria, ya que cada persona no tiene esos beneficios. En cambio, los del norte son más individualistas, porque puedes trabajar en ti mismo.

 

Hannu: A ti te pasa que cuando vuelves a España te ven diferente y en Finlandia también te ven distinta. 

Támara: Al vivir en un país extranjero y vivir otro tipo de experiencias te das cuenta cuando vuelves a tu país de que has cambiado mucho y tal vez la gente de allí sigue en la misma sintonía. Eso es chocante, ya que hay cosas que por mucho que compartas no las van a entender hasta que no vivan la misma experiencia.
En España, no tengo apariencia de española. Y en Finlandia surge el juego del engaño, porque con mi apellido y apariencia finlandesa pueden pensar que soy de allí, pero se dan cuenta de que no, porque no hablo bien el idioma. Yo he intentado introducirme en círculos fineses e internacionales, y surge una contradicción. En los internacionales, a veces piensan que soy más privilegiada por mi apellido porque puedo entrar con más facilidad en los círculos fineses para buscar trabajo y no es así, porque yo no tengo la lengua y esa es la clave para integrarse. Y en los círculos fineses, cuando ven que no hablo el idioma, ya me empiezan a tratar diferente. En entornos profesionales sobre todo es difícil integrarse sin el finés.
 

Hannu: ¿En Helsinki existe algún tipo de comunidad española o de habla hispana?

Támara: Sí, hay comunidades de todo tipo. Yo me siento más unida con la comunidad latinoamericana, que además compartimos la lengua. Me empecé a relacionar con las personas que estaban en el mismo ámbito que yo, vinculadas con el arte y la cultura.
Hablando inglés puedes relacionarte. Aquí en Finlandia todos hablan inglés desde pequeños, pero aún así, ponen muchas trabas en el ámbito profesional si no tienes el idioma. Pienso que sería bueno que personas de otros países pudieran aportar sus conocimientos en el ámbito cultural, pero las puertas están cerradas muchas veces si no sabes finés.

Presentación del Festival de Cine de Cinemaissí en 2022

Hannu: Y ahora qué expectativas tienes, ¿algún proyecto nuevo?

Támara: Ahora estoy con ganas de centrarme en mis proyectos cinematográficos. Estoy terminando un guion de cortometraje y quiero presentarlo a productoras de Finlandia y España. Es de hecho un proyecto que salió seleccionado hace un par de años en Acció Curts de Barcelona, un programa de Dones Visuals para promover nuevas directoras de cine.
Por otro lado, en el ámbito audiovisual, el año pasado estuve filmando eventos y tomando fotografías para una asociación internacional de cultura y me gustaría hacer algo parecido este año, para mantenerme mientras lo compagino con mi proyecto de guion.

 

Hannu: ¿Y ese es tu sueño artístico?

Támara: Sí. Escribir y dirigir. Tengo varias ideas de películas que me gustaría desarrollar en un futuro cercano. Y quizá en algún momento, volver a España también con estos proyectos, cuando se diera la oportunidad.

Támara, en el centro, con el equipo de filmación de un cortometraje

Támara Aalto es una cineasta originaria de Zaragoza, España.
Ha dirigido cortometrajes independientes, trailers y teasers para diferentes artistas. Además, ha trabajado como Directora Artística en el Festival de Cine de Cinemaissí Latin American Film Festival en Helsinki y ha impartido clases de cine como profesora de cine para adultos y niños, además de su experiencia en diferentes roles en sets de filmación.
Su formación cinematográfica incluye talleres y cursos intensivos en Barcelona, ​​Nueva York, Londres, Buenos Aires, Helsinki, Estocolmo, Riga y Budapest. Siempre está en búsqueda de nuevas perspectivas en el lenguaje cinematográfico. Sus trabajos se centran en el feminismo, el sentido de la pertenencia y la equidad social.

Páginas web:

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